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Renting y alquiler

Diferencias entre leasing financiero y renting tecnológico

15/12/2020

Tiempo de lectura: 5 minutos

¿Hay diferencias entre leasing financiero y renting tecnológico? Sí las hay, estos dos servicios cuentan con puntos en común, pero también con características que los hacen distintos.

Uno de las principales aspectos que hay que tener en cuenta es que todas las empresas necesitan financiación. Pero cuando se habla de tecnología, esto se vuelve complicado, pues la obsolecencia tecnológica no da espera, y con el paso del tiempo los equipos deben actualizarse. Por ello, antes que financiar con recursos propios, el leasing y el renting tecnológico son una buena opción.


¿Cuáles son las diferencias entre leasing y renting tecnológico?

El leasing financiero es un contrato financiero en el que, una vez finalizado, existe la opción de compra por parte del arrendador. Este tipo de recurso permite una financiación de hasta un 100 % según el proveedor financiero que tenga. Sin embargo, los intereses son altos y hay exigencia de montos mínimos en el préstamo asociado. Una de las desventajas de este servicio, es que cuando se pueda ejercer la posibilidad de compra los bienes ya estarán obsoletos. No tiene sentido invertir en máquinas con más de tres años de uso, y que probablemente están sin garantía y se encuentran ya con un nivel de obsolescencia.

Además, la empresa con la cual se hace el contrato, que es generalmente un banco, no presta ningún tipo de servicio sobre el bien. Se trata de una transacción que se comporta como un préstamo, muy útil para organizaciones grandes con más de 2.000 usuarios tecnológicos que, generalmente, cuentan con áreas de TI con buenas capacidades técnicas tanto en software como en personal.

Por su parte, el renting es una fórmula a través de la cual se alquilan equipos a mediano o largo plazo. Cuenta con la gran ventaja de que permite adecuarlos a las necesidades de la empresa. Ofrece una actualización constante para la plataforma sin generar endeudamiento. Esta es una de las diferencias más importantes, puesto que mientras con el leasing se puede ejercer la opción de compra, con el renting, una vez termine el contrato, los equipos serán devueltos para renovarlos por unos nuevos.             

Crecimiento orgánico: Un aspecto que los gerentes o directores administrativos deben tener en cuenta a la hora de decidir usar este servicio de renting es saber que tienen la posibilidad de crecer de manera orgánica, es decir, al ritmo que su empresa lo va necesitando. Esto incluso permitiéndole realizar contratos individuales. A su vez la decisión de Leasing Financiero esta dada por negociaciones mínimas, que según el proveedor financiero empiezan en contratos de $30 millones de pesos por transacción. Y ese ultimo ejemplo se aleja de la realidad de la empresa mediana y pequeña que crece normalmente en transacciones individuales.

Actualización tecnológica: El renting es una alternativa cada vez más común, ya que mantiene la base tecnológica empresarial actualizada sin que la organización incurra en gastos de mantenimiento. Estos, además, se incrementan en la medida en la que el equipo envejece.

Cobertura: Un contrato de renting aporta más coberturas y, aunque a primera vista el costo puede parecer mayor, no se pagan obligaciones financieras, de seguros, reparaciones, mantenimientos ni coberturas a garantías. También es una muy buena opción porque deja realizar renovaciones y actualizaciones constantes por lo que, si su empresa es de base tecnológica o creativa, es un modelo muy atractivo.

Mantenimiento: Mientras en el renting es el arrendador el que asume los costos pues el bien regresará a sus manos; en el leasing, este valor lo cubre el arrendatario.

Tratamiento tributario: el leasing financiero implica cargar al balance general con activos y pasivos, mientras que gracias a NIIF 16 el Renting Tecnológico permite dejar este endeudamiento fuera del balance (para activos con costo inferior a USD 5.000), lo cual da una mejor calificación de eficiencia financiera.

Todo lo anterior significa que el renting es un servicio que brinda un acompañamiento durante todo el ciclo de vida del activo. Elegir el renting es, entonces, tener facilidades como soporte técnico, acompañamiento y asesoría en mantenimientos preventivos y correctivos, informes de mensuales de uso entre otros. El renting descarga tareas operativas a los equipos de TI en organizaciones de más de 50 usuarios tecnológicos.

De todo esto se puede concluir que, mientras el leasing está dirigido a grandes organizaciones con muchos empleados y con áreas técnicas con una estructura de personal y herramientas de gestión muy robusta, el renting es más conveniente para empresas medianas y pequeñas, que necesitan optimizar sus recursos económicos y de personal en áreas de tecnología.